¡Tu voz tiene el poder de traer el cielo a la tierra! Aunque el enemigo ha tratado de limitarla, tu voz no se confina a tu automóvil, tu dormitorio ni a tu ducha. Es posible que te hayan silenciado o te hayan dicho que no tienes nada valioso que decir, pero Dios quiere usar tu voz. Él pondrá sus palabras en tu boca para que cuando tú hables, él sea el que hable. John Eckhardt te muestra en su obra, Activa el cielo, lo siguiente: Cómo puede, tu voz, incrementar el reino de Dios y traer sanidad, liberación y salvación. Las virtudes que te ayudarán a moderar tu lengua con el fin de que entregues el mensaje correcto en el momento correcto, desde una profunda posición correcta. La importancia de lo profético: conocer el corazón y la mente de Dios para poder declarar su voluntad en la tierra. Declaraciones y confesiones que te ayudarán a romper tu silencio y a desarrollar una nueva audacia. Es tiempo de dejar de quejarte y empezar a profetizar. Es hora de dejar de hablar de lo mala que es la situación y abrir la boca para declarar la Palabra de Dios. Es hora de manifestarte y activar el cielo.

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